- Desde el fondo de ti, y arrodillado, un niño triste, como yo, nos mira.
- Por esa vida que arderá en sus venas tendrían que amarrarse nuestras vidas.
- Por esas manos, hijas de tus manos, tendrían que matar las manos mías.
- Por sus Ojos abiertos en la tierra veré en los tuyos lágrimas un día.
Feliz Rodriguez de la Fuente
Hace 14 años
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